Brasil selló hoy su visado para el Mundial de 2010 de la forma ideal: con un triunfo y humillación incluida en la casa de su más enconado rival; y un equipo de sólido desempeño que mira por el retrovisor la lucha de siete selecciones por tres pasajes directos y otro con escala que restan a las eliminatorias.
Treinta puntos en quince partidos, un aprovechamiento del 66,6 por ciento que dista del balance de 27 puntos con altibajos alcanzado por Chile y Paraguay, tiene como valor agregado una producción arrolladora: 28 goles y apenas siete encajados.
El Brasil de Dunga, que comenzó criticado, hoy es unanimidad tras su 'gigante' victoria en Rosario por 1-3 sobre Argentina. Fue la segunda derrota como local de la albiceleste en las eliminatorias y en un día exacto como el de hace dieciséis años, cuando Colombia se impuso por 0-5.
Luis Fabiano en dos oportunidades, Luisao con un soberbio cabezazo, y Kaká, en otra demostración exquisita de sus virtudes, infligieron el peor golpe que podían recibir Maradona, Messi, Tévez, Verón y compañía.
Y las demás selecciones de las eliminatorias, pues son las demás. Chile, que venía con paso firme, tropezó y sufrió en casa para igualar 2-2 con Venezuela y aplazó así la fecha de la confirmación de su presencia en Sudáfrica.
También echó agua fría al entusiasmo desbordado que ha despertado su campaña de la mano del entrenador argentino Marcelo Bielsa y desperdició la oportunidad de seguir a la sombra de Brasil, un privilegio que ya perdieron Paraguay y Argentina.
Paraguay, que lideró las eliminatorias durante gran parte del trayecto, ha perdido consistencia y ni la victoria pírrica de hoy en Asunción sobre la ya eliminada Bolivia pudo cambiar la imagen.
Con 27 puntos, los de Gerardo 'Tata' Martino pueden declararse satisfechos con el hecho de ser compañeros de viaje de Chile.
Argentina y el proyecto Maradona, que no rinde los esperados frutos, puede rescatar en su magro balance que mantiene en su poder el cuarto y último pasaje directo a Sudáfrica reservado por la FIFA para la región.
Un premio pequeño para su historia.
Con 22 puntos en las alforjas, Argentina quedó a dos de Colombia y he aquí un caso de 'resurrección' futbolística en la decimoquinta jornada de las eliminatorias sudamericanas.
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