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Estados Unidos goleó 3-0 a Egipto, hoy en Rustenburgo en la última fecha del grupo B, y milagrosamente se clasificó a las semifinales de la Copa Confederaciones-2009, ayudado por la goleada de Brasil ante Italia (3-0) en Pretoria. Los estadounidenses se impusieron sorpresivamente con tantos de Charlie Davis (21), Michael Bradley (63) y Clint Dempsey (71), y ahora deberán enfrentar en semifinales al superfavorito España, ganador de la llave A con puntaje ideal, el próximo miércoles en Bloemfontein.

"El mérito es de todo el equipo y del cuerpo técnico, al conseguir el resultado que buscamos. Ahora nos tenemos que preparar para el choque contra España", afirmó el héroe Dempsey, mejor jugador del partido según la FIFA. La otra 'semi' la protagonizará Brasil con el anfitrión Sudáfrica, el jueves en Johannesburgo.

Cuando casi todos daban por muerto al equipo del técnico Bob Bradley, que necesitaba una extraña combinación de resultados, el capitán Landon Donovan condujo a sus tropas a un triunfo histórico que lo dejó en segundo lugar del grupo, gracias a una mejor diferencia de gol que Italia y Egipto. "Estabamos en un grupo muy difícil, pero supimos aprovechar nuestra oportunidad. Jugamos con energía", afirmó Bradley.

De hecho, los tres equipos terminaron con tres unidades, pero los norteamericanos tuvieron una diferencia de gol negativa de -2, al igual que Italia, pero con un gol más a favor. Los bicampeones africanos terminaron con -3 de diferencia. Los Faraones salieron al ataque frente a la necesidad de la victoria y tuvieron la primer posibilidad seria a los 12 minutos, tras un centro de Ahmed Eid que no llegó a concretar de primera Mohamed Aboutrika.

Pero los hombres de Bob Bradley no se dejaron llevar por delante y replicaron. Primero avisó Landon Donovan, quien penetró solo al área y en lugar de disparar, envió un centro al vacío. Estados Unidos parecía aferrarse al milagro, una goleada y derrota fea de Italia ante Brasil, y lo salió a buscar. Clint Dempsey probó al portero Essam al-Hadary y dos minutos después, tras un centro de Jozy Altidore, el atacante Charlie Davies aprovechó un desentendimiento de la zaga africana y puso el 1-0, después del choque entre Al Hadary y un compañero.

El campeón de la CONCACAF siguió buscando goles y Donovan, tras un jugadón con regates, se perdió el segundo frente al meta egipcio. Eso abrió el partido y ambos empezaron a caminar por el abismo. Primero Aboutrika con un bombazo, minutos después Dempsey con un cabezazo casi estira. El técnico Hassan Shehata parecía enviar al bicampeón egipcio al golpe por golpe y sobre el final lo tuvo dos veces, la más clara con un misil que clavó Hosni Abd Rabbou en el travesaño.

El 3-0 de Brasil ante Italia en Pretoria dio ánimo a ambos equipos en el descanso. En ese momento, por diferencia de gol clasificaba Egipto, pero nuevamente los más peligrosos fueron los estadounidenses, en el segundo tiempo. A los 52, Altidore fusiló al portero desde el corazón del área y Fathi rechazó en la línea con la mano, infracción que el árbitro neozelandés Michael Hester no pitó.

La justicia llegó once minutos después, cuando Michael Bradley, el hijo del técnico, anotó tras centro del capitán Landon Donovan (63), para abrir la esperanza. Los nervios paralizaron a Egipto, que no reaccionó y lo pagó en el minuto 71, cuando Dempsey puso el 3-0 de la clasificación con un cabezazo tras centro de Jonathan Spector a la boca del área. "Nuestro juego no estuvo a la altura para clasificarnos, pero sacamos conclusiones positivas", dijo el ayudante egipcio de Shehata, Shawki Ghareeb